Mira y camina; mira y camina {Libre}

Selena caminaba con tranquilidad por las calles de Hollywood, mirando cada uno de los vistosos escaparatos que se le presentaban delante. Su pelo estaba recogido cuidadosamente en una cola, con unas argollas colgandole de las orejas y unos jeans ajustados. También llevaba puesto uno de esos polos antigos que decían "I ♥ LA" con letras rojas y grandes, de fondo blanca. No hacía frio, era una noche bastante templada y agradable para dar una vuelta. Taylor estaba grabando e iba a llegar tarde a casa y ella no quería pasar mucho tiempo sola en el departamente; aunque prendiera todas las radios y los televisores de todos los cuartos, igual iba a sentir ese silencio perturbador y asfixiante que tanto miedo le daba.

Fue por eso que cogió unos cuantos dolares y se fue a pasear por ahí, sin ningún lugar expecífico en mente. Ni siquiera se habia molestado en sacar los lentes negros que utilizaba para que la gente no la reconociera. ¡Estaba en Hollywood! La gente ya debería de estar acostumbrada a verla, además, de seguro ella ya les habia firmado autógrafos y se habia tomado fotos a cada uno de los habitantes de Los Angeles. La música le resonaba en las orejas, lo suficientemente bajo para esuchar las demás cosas que pasaban a su alrededor. - ¡Selena!¡Selena! - "Sonríe y voltea" . Preparo su sonrisa, para luego girarse con actitud natural. Un fotógrafo la hizó cerrar los ojos con fuerza debido al flash. Sólo eran un par, pero igual eran demasiado molestos para el ambiente de paz que habia tenido hasta hace unos segundos atrás. - ¿Por qué tan sola?¿Estan bien las cosas con Taylor? - ¿Acaso no podía ya salir sola? Al parecer para la prensa eso era un signo de rompimiento, o por lo menos de problemas. No se había movido ni un milímetro, ¿qué caso tenía?

Negó con la cabeza, aún conservando una pequeña sonrisa en los labios. - Esta trabajando, nada más. - Se volteó y siguió caminando, frunciendo el ceño de sólo pensar que algún día las habladurías se podrían hacer realidad. - Disculpa, ¿para qué sigues siguiendome? - Había escuchado pasos atrás de ella y era por eso que habia volteado, encontrandose con el mismo fotógrafo. - Por favor, ya tomaste tus fotos, ahora dejame caminar. - El hombre la miró, sopesando si debía irse o no.

Me había pasado el día caminando y caminando. No tenía ningún rumbo fijo, solo vagaba sin la necesidad de detenerme. EL tiempo se me hacía muy pesado y lento, eso me frustraba un poco. Sin embargo, si no pensaba en el día pasaba volando como cualquier avioneta que se podía ver seguido por el cielo. Sabía que las calles no eran el lugar más seguro de todos, pero me gustaba sentir el aire libre, y en cada paso esa firmeza que me auto determinaba con solo verme. Por lo tanto solo me deduje a mi misma con la chica a la que no se acercarían por simple carácter.

Para mí eso era bueno. De todo tipo de cosas que sucedían a mí alrededor la firmeza no era mucho de mi estilo, pero así era mi estereotipo y no se podía cambiar por nada en el mundo. Como me habían dicho antes “siempre serás quien en un inicio eres” y siempre comprendí esa frase. Aunque hagas una tontería eso te seguirá para siempre. Era como una pequeña cortada que identifica a una de los demás. Por si acaso, siempre seria la misma de siempre.

Entre todo ese gentilicio que se formaba por las calles, que en verdad me impedía el paso, me acerque tan solo por curiosidad. Escuche una voz familiar. Fruncí el ceño al ver como acosaban a Selena con unas preguntas que no tenían sentido desde el punto de la palabra. Esquive a le gente y con una sonrisa me coloque frente a ella. De la forma más sutil e irreversible, justamente como había aprendido para modelar. Me giure donde se encontraba el fotógrafo y mire su cámara enarcando ambas cejas.

-Disculpe mi descortesía… -musite dirigiéndome al joven que se encontraba frente mío. El rápidamente se irguió de hombros con una sonrisa patosa y algo perturbadora. No hice más que hacer lo mismo pero de una forma más “normal”- pero esa cámara corre la mala fortuna de no tener buena resolución –comente con una risita- y olvido quitarle esa mancha del lente que hace que todo se vea borroso –le hice un gesto amable y seguido tome a Sel por el brazo alejándola de esa gente. Trate de no reír por ver la expresión del antiguo acosador en ocuparse en la cámara. Nos detuvimos a unos cuantos metros. Me saque las gafas de sol que tenia colgadas en el escote de la camisa y se las coloque donde debían de estar.- esos tíos solo molestan –le dije poniendo los ojos en blanco

Y en eso, Susan al recate. Su amiga habia llegado justo cuando se debatía en correr o no porque el hombre no se habia movido ni un centímetro, pero ella tampoco. La observó en silencio detrás de ella, sonriendole con la cabeza ladeada aunque Susan no la veía. Era uno de esos momentos en los que de verdad le gustaría tener la confianza en si misma que todo el mundo daba por entendendido que tenía. Pero no, la única fuerza que tenía a diario eran sus hermanas y Taylor; en ese preciso momento una de sus más cercanas amigas. Tenía mucha suerte de estar rodeada de personas tan geniales y que la quisieran tanto; aunque ella no pudiera retribuirles con la intensidad querida.

De un momento a otro ya estaban ligeramente apartadas. Se acomodo las gafas de Susan en los ojos con cuidado. - No olvidare traer un par la proxima vez que salga. - Sus sonrisa se hizó ligeramente más grande, lo necesaria para que esos graciosos hoyuelos se le formaran en las mejillas. - Gracias Su, ya me estaba preparando para correr. - Dijó con sinceridad, porque era exactamente lo que estaba por hacer. - Imaginate que ni salir sola puedo ahora. - Se encogió de hombros, suspirando. - Hace un tiempo que no te veía, ¿donde has estado? - Preguntó, frunciendo el ceño

Off: Post asco, lo siento tanto u.u